Washington D.C., 2 de febrero de 2022 (OPS) – Si bien el 63% de las personas en América Latina y el Caribe ya han sido vacunadas contra la COVID-19, la cobertura sigue siendo desigual. Mientras 14 países y territorios han vacunado al 70% de su población, el mismo número no ha logrado alcanzar ni siquiera el 40% de cobertura, afirmó hoy la directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa F. Etienne.
Con 7 millones de nuevas infecciones y más de 34.000 muertes registradas en la región desde la semana pasada, la directora de la OPS destacó las “brechas preocupantes” en la vacunación de las poblaciones de riesgo, dado que algunos países informaron una menor cobertura entre los adultos mayores en comparación con los grupos más jóvenes, que corren menos riesgo de desarrollar una enfermedad grave.
Durante una sesión informativa para los medios, la doctora Etienne dijo que el alcance total de la disparidad sigue siendo desconocido, ya que los datos detallados son limitados, por lo que es vital, agregó, que “los países recopilen y comuniquen datos que muestren la cobertura de vacunación por edad, sexo o por grupo de riesgo”.
“Estos datos son cruciales para diseñar campañas de vacunación específicas, maximizar el impacto de las dosis y salvar vidas”, subrayó.
De cara a las próximas campañas de vacunación contra la COVID-19, la directora de la OPS anunció que se espera que el suministro de vacunas se incremente en 2022.
Al agradecer a los donantes que “ayudaron a nuestra región a asegurar dosis cuando el suministro era limitado”, la doctora Etienne señaló que otras donaciones de Estados Unidos, España, Canadá, Alemania, Francia y otros países ya suman unos 26 millones de dosis.
El Fondo Rotatorio de la OPS, que hasta ahora ha adquirido casi 100 millones de dosis, también está en camino de obtener otros 200 millones de dosis en nombre de la región este año.
Mientras llegan estas dosis, la doctora Etienne instó a los países a que empiecen a hacer los preparativos necesarios para el despliegue de las vacunas, incluyendo la inversión en programas de vacunación, la recopilación y el reporte de datos detallados sobre las vacunas y la priorización de los grupos de alto riesgo.
“Los países deben reorientar sus esfuerzos hacia la protección de los trabajadores de salud, las personas inmunodeprimidas y los adultos mayores, en primer lugar”, remarcó.
También envió un mensaje especial a los millones de adultos del Caribe que aún no han recibido sus vacunas.
“Soy médica, esposa, madre y abuela. No podía esperar a vacunarme, estaba muy ansiosa por mi bienestar y el de mi madre de 95 años”, dijo la doctora Etienne. “Por favor, no se demore, vacúnese hoy”, instó. “Las vacunas contra la COVID-19 son seguras y eficaces y son la mejor manera de protegernos a nosotros mismos, a nuestras familias y a nuestras comunidades de este virus”.
En cuanto a la situación de la COVID-19 en la región, la directora de la OPS informó que el aumento de las infecciones parece estar disminuyendo en los lugares afectados más tempranamente por la variante ómicron.
La mayor parte de los nuevos casos se registraron en América del Norte, pero el aumento continúa en América Central y del Sur y las muertes aumentaron casi un tercio en todas las subregiones.
En el Caribe, las muertes se han más que duplicado en Cuba, Bahamas y Antigua y Barbuda, y en otras islas, como Martinica y Guadalupe, el virus se está propagando rápidamente entre la población joven y no vacunada.
“Estas tendencias muestran que debemos seguir manteniendo cada parte de nuestra respuesta a la COVID”, sostuvo la doctora Etienne. “Las vacunas, las pruebas y la continuación de las medidas de salud pública, como el uso de mascarillas y el distanciamiento físico, siguen siendo cruciales”, subrayó.