Washington, DC, 23 de febrero de 2022 (OPS)- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidió a los países de las Américas redoblar los esfuerzos para vacunar a los niños contra la poliomielitis, cuya tasa de vacunación con las tres dosis de la vacuna se ubicó en el 82% en 2020, la más baja desde 1994, año en que se certificó que el continente americano estaba libre de la enfermedad.
“La amenaza de la reintroducción de la poliomielitis en la región es real”, afirmó Andrés de Francisco, director de Familia, Promoción de la Salud y Curso de Vida de la OPS. “No podemos retroceder. Evitar casos de polio depende de tener una población infantil altamente vacunada y una fuerte vigilancia de la enfermedad”, agregó.
La poliomielitis es una enfermedad altamente infecciosa causada por el virus de la polio o poliovirus. El virus, que se transmite principalmente a través del contacto con heces infectadas, puede afectar el sistema nervioso y causar parálisis en las piernas o los brazos. En 1975, antes de la inmunización generalizada, casi 6.000 niños quedaron paralizados en la región debido a la poliomielitis.
En 2021, las Américas celebró el 30º aniversario del último caso de polio por poliovirus salvaje en la región. Sin embargo, si las coberturas de vacunación no son superiores al 95% en cada municipio y cada comunidad, la polio puede volver a causar enfermedad paralítica y regresar a la región. En 2020, 12 países reportaron coberturas menores al 80% para la tercera dosis de la vacuna.
En medio de la pandemia por COVID-19, muchos esfuerzos de control se suspendieron y se estima que las tasas de vacunación siguieron disminuyendo, una tendencia que comenzó incluso antes de la pandemia.
El 17 de febrero pasado, las autoridades de Malawi, en África, declararon un brote de poliovirus salvaje de tipo 1 tras detectarse un caso en un niño de corta edad en la capital, Lilongwe. El último caso de poliomielitis en Malawi se registró en 1992 y África fue declarada libre de la enfermedad en 2020. La cepa viral detectada en Malawi está genéticamente relacionada con un poliovirus salvaje tipo 1 detectado en 2019 y 2020 en Pakistán, uno de los dos países del mundo (el otro es Afganistán) donde la polio sigue siendo endémica.
“El reciente caso de poliovirus salvaje en África es un recordatorio de que cuando el virus sigue circulando, los niños de todo el mundo están en riesgo”, advirtió De Francisco. “Los países deben hacer todo lo posible para asegurar que las Américas se mantenga libre de la enfermedad, lo que incluye contar con alta cobertura de vacunación, un sistema de vigilancia sensible, y un plan de respuesta a brotes de polio actualizado”, remarcó.